El carril bici bidireccional que unirá el paseo Pamplona, María Agustín y la plaza de la Ciudadanía de Zaragoza se construirá por la mediana, obligando a utilizar entre uno y dos carriles de coches, y costará alrededor de 235.000 euros. La ampliación de la red ciclable en este céntrico tramo de la ciudad fue una de las propuestas de los presupuestos participativos más votada y solicitada tanto como proyecto de ciudad como obra de distrito. En este último caso, no llegaría a la plaza, sino que terminaría en Anselmo Clavé.

El ayuntamiento presentará mañana los informes de viabilidad de las propuestas más votadas en la primera fase de los presupuestos participativos, determinantes para decidir si se llevan a cabo. Aunque todavía falta por redactar el proyecto de obras, el carril bici será similar al de Gómez Laguna, es decir, se construiría por la mediana. De esta manera se reduce la obra civil, ya que no afecta a las paradas de autobús ni a las entradas y salidas de calles. Como es habitual, se utilizará uno de los carriles de circulación aunque no se descarta tener que reducir uno por cada sentido, de manera que quedaría uno para el paso de autobuses y otro para vehículos privados.

En la zona de Escrivá de Balaguer no está claro por dónde circularían las bicis ya que, al no tener un carril destinado exclusivamente al transporte público, la red ciclable, también bidireccional, sí podría construirse en un lateral.

CONDICIONES

Entre las condiciones que hay sobre la mesa para llevar a cabo el carril para las dos ruedas destacan dos: que afecte lo mínimo al tráfico rodado y que su coste no sea muy elevado. Este último aspecto está directamente relacionado con la futura línea 2 del tranvía, ya que el trayecto sería el mismo y el proyecto del Urbos 3 incluye la incorporación de la red ciclable. Como por ahora no está claro si se llevará a cabo o no esta faraónica obra, desde el consistorio están dispuestos a invertir en este nuevo carril bici en beneficio de la movilidad sostenible.

La previsión de obra es a medio plazo, ya que, si sale adelante -no hay que olvidar que forma parte del proceso de presupuestos participativos-, habría que redactar el proyecto completo, sacarlo a licitación y ejecutarlo, así que hasta dentro de un año no se inauguraría este tramo. El paseo Pamplona y María Agustín son las zonas del centro de Zaragoza que más tráfico soportan y, junto a Echegaray, de las que más ruido sufre. Por ello, la concejala de Movilidad y Medio Ambiente, Teresa Artigas, ya anunció en junio del año pasado que el Gobierno municipal no descartaba reducir el tráfico y construir un carril para bicicletas. Sus vecinos soportan hasta 75 decibelios cada día y más de 50.000 vehículos de media circulando.