El éxito del programa ARCCA evidencia, según el Departamento de Sanidad, el buen funcionamiento de la centralización de servicios. La creación de unidades de referencia --también se emplea en varices o diagnóstico prenatal, entre otros procesos-- permite "la colaboración entre los diferentes hospitales para crear esas unidades de referencia necesarias en algunos procedimientos que, además, suponen un mejor rendimiento de la tecnología y una mayor eficacia a través de técnicas excelentes en centros que ofrecen sus servicios a todo el territorio aragonés cuando, antes, la oferta de cada hospital se circunscribía a esas cuatro paredes", aseguró el director general de Asistencia Sanitaria, Manuel García Encabo. De hecho, desde la Administración se deja claro que este recurso se va a seguir introduciendo "poco a poco" en otros procesos. De momento, también se está llevando a cabo esta práctica en disciplinas como Oncología radioterápica o Medicina Nuclear. "Se trata de descentralizar procedimientos de cara a mejorar la calidad y la eficiencia", incidió García Encabo, que subrayó que estas unidades de referencia "son el presente, más que el futuro". Uno de los últimos procesos en sumarse a la lista de unidades centralizadas de referencia son las varices. El departamento de medicina vascular también está logrando resultados espectaculares a través de una técnica novedosa que se está usando para rebajar la lista de espera. Y el objetivo parece cerca de cumplirse. De hecho, en los últimos datos publicados por el Salud figura que son 53 los pacientes aragoneses que llevan seis meses o más esperando a ser sometidos a esta intervención, cuando el pasado mes de mayo la nómina de afectados por la demora superaba los 80.