Cerca de mil zaragozanos se echaron a la calle a primera hora de la noche de ayer para protestar a gritos contra el PP por entender que "manipula" la información relacionada con los atentados de Madrid y para exigir "la verdad" antes de acudir hoy a las urnas. La movilización empezó a las 20.30 horas ante la sede del partido, en la calle Verónica, como una concentración secundada por unos cien jóvenes. Una hora después, el grupo partió en manifestación por el Coso y conforme la comitiva subía por Independencia se iban sumando peatones. Los manifestantes recorrieron dos veces el paseo lanzando consignas contra el PP.

La sede popular permanecía cerrada y custodiada por tres agentes antidisturbios de la Policía Nacional y varias dotaciones de la Local. Los jóvenes, arremolinados en la acera del Teatro Romano, estaban acompañados por miembros de Chunta e IU, por dirigentes vecinales, como Chema Gregorio, y por miembros del movimiento ecologista y antitrasvase, como el profesor de la Universidad de Zaragoza Pedro Arrojo. "¡Asesinos!, ¡Este domingo lo tienen que pagar!, ¡Las bombas de Irak explotan en Madrid!, ¡Esto nos pasa por un Gobierno facha!, ¡Los que han muerto dijeron no a la guerra", fueron algunas de las consignas más coreadas.

Uno de los organizadores invitó a los participantes a acudir a la plaza de España a continuar la movilización porque, dijo, el Ministerio del Interior había dado órdenes de disolver las protestas en las sedes del PP.

La comitiva fue aumentando conforme avanzaba por Independencia. Algunos zaragozanos se quedaban perplejos por la manifestación. Otros arrancaban en aplausos desde las aceras. El despliegue policial antidisturbios en el palacio de Capitanía, en la plaza de Aragón, llevó a los más exaltados a lanzar consignas contra los agentes --"¡Policía asesina! y ¡No disparéis, somos panaderos!"--.

En Huesca, otro grupo de unas 50 personas también se movilizó ante la sede del PP.

Por su parte, el presidente regional del PP, Gustavo Alcalde, calificó de "absolutamente bochornosos" los actos de protesta, que consideró organizados con el fin de "presionar" a su partido y de "romper" la normalidad democrática en una jornada de reflexión. Al considerar la movilización como un acto ilegal, la dirección presentó un recurso ante la Junta Local de Zona.