A falta de cobertura propia, debido a una huelga de periodistas, las ediciones digitales de los periódicos noruegos presentaron el enlace real en Madrid con informaciones cortas de agencia y siempre con el recordatorio de la relación de cuatro años que el heredero de la Corona española mantuvo con Eva Sannum. Frases como "Felipe logró su Letizia" (Nettavissen ) y "El Príncipe que encontró a su princesa" (Aftenposten ) llenaban las informaciones de la boda. Pero para los noruegos, el vestido amarillo chillón de la princesa Marta Luisa, hija del rey Harald, acaparó la atención. De hecho, un comentario en la tele sueca, en que se calificó el vestido de "directamente desagradable y de payaso", generó una reacción airada de los noruegos. Sobre la boda, en la TV2 danesa se dijo durante el acto de entrega de las arras que "son monedas que se hicieron con el oro que las huestes del imperio español robaron a Suramérica en tiempos de la conquista". informa José Miguel Mielgo.