Aragón, y concretamente Zaragoza, está viviendo lo que algunos consideran una edad de oro en cuanto a conciertos y todos los fines de semana (de jueves a domingo) se programan alrededor de 40 actuaciones lo que la ha colocado, según el Anuario de Estadísticas Culturales, como la quinta comunidad que vivió más conciertos en el 2017, 5.733, solo superada por tres con mucha mayor población, Madrid, Andalucía, Cataluña y por una región eminentemente turística, Baleares.

Pero las cifras, que se podrían ver desde un punto de vista positivo, pierden mucho valor cuando se mira la ratio de espectadores por concierto, 190, lo que es la tercera peor cifra de España. Dicho de otra forma, solo cuentan con peor ratio, curiosamente Baleares (78) y Madrid (167) en una clasificación encabezada (quitando Ceuta y Melilla para no desvirtuarla por su baja población) por Asturias con 548 espectadores. La media española está en 238.

«Cualitativamente estamos viviendo una etapa increíble», señala Chema Fernández de Antípodas Producciones, «pero nos encontramos con una ciudad que no es sencilla y que cuenta con una oferta brutal cuando el volumen de población que acude a los actos culturales es bajísimo y, al final, siempre ves las mismas caras muy similares vayas al teatro o a los conciertos». Y esa es, señala el propio Fernández, «la lucha que tenemos, lograr romper la barrera de los públicos y poder llegar a más gente pero es complicado también cuando, por ejemplo, son los deportes los que ocupan todos los espacios y la cultura siempre queda relegada. Es una tarea de todos». Con respecto a los denominados grandes conciertos (hablando en términos de asistencia más allá de lo cualitativo), Fernández sí tiene claro que «en una ciudad como Zaragoza si no hay una inversión pública que los asuma, no se van a celebrar. Es imposible para nadie entrar ahí más que para las instituciones»

El anuario también desvela que los precios de las entradas (se incluyen también las actuaciones gratuitas) para los conciertos en Aragón está en 7,8 euros de media (0,4 más que la española) pero lejos, por ejemplo, de lo que se paga en Canarias (16,3 euros) o en Extremadura (11,6) por lo que parece más evidente que el problema de la falta de público es que la base no es amplia.

MÚSICA CLÁSICA

Más allá de la música popular, Aragón es la octava comunidad autónoma que más conciertos de clásica celebró en el 2017, un total de 666, que atrajeron a una media de 319 personas por cada uno de ellos (noveno puesto en el ranking nacional). En cuanto a los precios de las entradas, la media se situó en 6,3 euros (la nacional se fue hasta los 8,6) lo que le colocó en la décima comunidad muy lejos de Cataluña que cobra 15,7 euros por cada uno de los conciertos.