La Comisión de Mujeres Abogadas de Zaragoza aboga por incidir en la educación en valores y en igualdad como forma de hacer frente al creciente problema de la violencia machista. «Está demostrado que el endurecimiento de las leyes, por sí solo, no hace que bajen los delitos de que son víctimas las mujeres», manifestó ayer Carmen Alquézar, responsable de la citada entidad de letradas aragonesas.

La jurista destacó que, no obstante, las leyes, en particular la de violencia sobre la mujer, han servido para «visibilizar la gravedad del problema». Pero desde su punto de vista debe incidirse mucho más en la formación de los escolares y los estudiantes.

«Se da el caso de que ahora existe en una parte de la juventud una mentalidad mucho más retrógrada en materia de relación entre los sexos, es evidente que ha habido un retroceso en la mentalidad», añadió Alquézar, que también presta sus servicios en el turno que el Colegio de Abogados tiene para los casos de violencia machista.

En este sentido, la letrada se refirió al uso de las nuevas tecnologías de la comunicación como herramienta de control y también al fenómeno conocido como micromachismo. «Violencia contra la mujer no son solo los delitos de sangre, también un empujón, un zarandeo y un insulto constituyen formas de agresión», agregó.

Carmen Alquézar insistió en el hecho de que España es el país europeo que posee la herramientas legales más modernas contra la violencia de género. Pero asimismo advirtió de que no todo se puede fiar a esa circunstancia, pues hay naciones que, como es el caso de Estados Unidos, no consiguen reducir la violencia contra la mujer pese a que algunos estados aplican la pena de muerte. De ahí, dijo, que se deba prestar mucha más atención a la educación en valores de las nuevas generaciones.