La comunidad educativa aragonesa acogió con división de opiniones las propuestas electorales del PSOE sobre enseñanza, pero en lo que hubo unanimidad fue en la necesidad de que los socialistas se comprometan a aportar los recursos imprescindibles para poner en marcha su programa educativo.
Entre las medidas más importantes destacan dos que ya se aplican en Aragón, aunque aún no están implantadas al 100%: la gratuidad de los libros de texto y la ampliación del horario de apertura de los centros para que los estudiantes puedan realizar actividades extraescolares. Además, José Luis Rodríguez Zapatero prometió aumentar la inversión pública en enseñanza, escuelas públicas bilingües, un ordenador por cada dos alumnos en todas las aulas y un mayor control sobre la gestión y la admisión de estudiantes de los colegios concertados.
Entre los sindicatos, CSI-CSIF avaló los planes del PSOE. "Nosotros apoyaremos todas las opciones que defiendan la escuela pública, pero pedimos un mayor compromiso financiero, porque todo lo que se propone cuesta dinero y serán necesarios más recursos humanos", explicó a este diario Eliseo Moreno, responsable de CSI-CSIF en el ámbito educativo. Jesús Pueyo, de FSIE, lamentó las referencias de Zapatero a la escuela concertada: "Sólo menciona la enseñanza concertada para exigir control, pero no habla de ayuda o reconocimiento a los trabajadores".
Entre los padres también hubo mejor acogida desde la escuela pública que desde la concertada. Teresa Paniello, presidenta de Fapar (federación que agrupa a las asociaciones de padres de la red pública), está de acuerdo con las propuestas del PSOE, aunque pidió concreciones sobre los cambios que introducirían en la LOCE, "sobre todo respecto a la asignatura de Religión, a la que nos oponemos".
Luis Carbonel, de Concapa, fue duro: "Con la ampliación del horario de los centros se quiere convertir España en una gran guardería. Hay que ayudar a los trabajadores a que pasen más tiempo con su familia, no a que puedan tener a sus hijos más horas en el colegio".
José María Marín, responsable de la patronal CECE, se mostró de acuerdo con las líneas generales, pero lamentó que la única referencia a la concertada sea para exigirles mayor transparencia. "Siempre parecemos los malos de la película. Que se exija control en todos los colegios, públicos y concertados", resaltó.
