Hacía frío en la plaza de toros de Zaragoza. Uno de esos fríos que se mete en el cuerpo poco a poco y congela los pies y la nariz. Pero los asistentes se calentaron coreando entusiasmados las consignas que --cada dos por tres-- lanzaba el animado grupo de nuevas generaciones situado al fondo del escenario. Y agitando las banderas. O respondiendo con calor a las preguntas retóricas de Mariano Rajoy. "¿Quién atajará la inseguridad ciudadana?", decía el candidato. "El Pepeeeeeeee", contestaba el respetable.

El himno de los populares a ritmo de bakalao inundaba la plaza minutos antes del acto. Subió de tono la música. Se alzaron las banderas y se estiraron los cuellos para ver salir al actor principal. Falsa alarma. A la tercera fue la vencida. Estruendo de himno y candidatos en constante reparto de besos y manos.

José Atarés, exalcalde y candidato a senador, caldeó el ambiente. Gustavo Alcalde, presidente regional del partido, hizo la intervención más interactiva de todas e hizo subir un poco más la temperatura. Luisa Fernanda Rudi, rojo sobre negro en su atuendo, tomó el relevo bajando algunos grados la tensión con un hablar pausado y medido. Excepto al final: el entusiasmo le provocó tos y a punto estuvo de quedarse sin voz.

No cesaron las aclamaciones a Rajoy (con distintos sonsonetes, A La Moncloa, Mariano, a La Moncloa , Vamos a más, Partido Popular o Se nota, se siente, Mariano presidente ). Varias veces tuvo que interrumpir su discurso el candidato ante tanto eslogan y tantas palmas.

La plaza no se llenó, pero Rajoy estuvo, más que arropado, abrazado por los miles de aragoneses que escucharon sus palabras con esperanza y ganas de triunfo. Varias banderas de España, ninguna de Aragón y hasta tres pancartas que rezaban: Calatayud con Rajoy .