Zaragoza viaja el jueves a París en pos de la Expo 2008 con las escrituras de propiedad del meandro de Ranillas en la cartera. El presidente de Ibercaja, Amado Franco, y el teniente de alcalde de Urbanismo del ayuntamiento zaragozano, Antonio Gaspar, firmaron ayer el último papel de la permuta que pone en manos del consistorio más de un millón de metros cuadrados junto al Ebro para albergar la exposición internacional, y que, en contrapartida, cede a la entidad financiera suelo para levantar 2.170 viviendas protegidas en Arcosur.

"En cinco segundos de firma se resume una gran actividad desarrollada durante tres meses. Ha sido una operación compleja, laboriosa desde el punto de vista legal y administrativo, pero hemos llegado a tiempo", manifestó Franco. Por su parte, Gaspar resaltó que ahora Zaragoza se presenta al examen de París sin un problema, el de la propiedad del suelo, que podía dar ventaja a las competidoras de Trieste (Italia) y Tesalónica (Grecia).

MAS DE 66 MILLONES El acuerdo con el consistorio para que Ibercaja compra Ranillas y la traspasara al patrimonio de la ciudad se hizo oficial el 13 de septiembre y ayer concluyó el proceso. La entidad financiera ha desembolsado 66,3 millones de euros por 102 hectáreas de suelo en el meandro y el consistorio ha pagado con parte de los derechos urbanísticos que obtendrá en el desarrollo de Arcosur.

Además de colaborar en el empeño general de la ciudad por conseguir la muestra, "un gran escaparate para poder exponer Zaragoza", Franco destacó la segunda vertiente del convenio, la promoción de viviendas de protección oficial. "La caja relanza un bien necesario y escaso para toda la sociedad", señaló.

Con la adquisición de 2.170 pisos protegidos que correspondían al consistorio en Arcosur, Ibercaja dispondrá de 4.107 viviendas en la zona, puesto que ya tenía propiedades en el citado sector. El presidente de Ibercaja adelantó que espera poder construir en dos o tres años.