Un cuarto caso de meningitis ha disparado la crispación en el colegio Josefa Amar y Borbón, cuya asociación de padres considera que ha habido "negligencia" por parte de la Consejería de Salud y Consumo. La Administración mantiene que ha cumplido los protocolos obligatorios y que se trata de una infección vírica, mucho más venial que la bacteriana, pero los progenitores aseguran que la dirección de este centro del barrio zaragozano del Actur se enteró de la enfermedad a través de una familia afectada. El colegio tenía que cerrar ayer sus puertas, pero se vio obligado a atender a alumnos de Primaria hasta después de comer porque muchos padres no se habían enterado, ya que la decisión se tomó a última hora de la tarde del jueves.
La Dirección General de Salud Pública confirmó ayer la aparición de un nuevo caso, probablemente relacionado con los detectados en las últimas dos semanas y posiblemente de origen vírico, según informaron fuentes del Gobierno aragonés en un comunicado. Las cuatro afectadas son niñas. Las dos primeras compartían aula en el primer curso de Infantil (tienen tres años) y ya tienen el alta médica. La tercera cursa segundo de Infantil (tiene cuatro años) y permanece ingresada en el hospital Miguel Servet. La última tiene cinco años (está matriculada en el último curso de Infantil) y también se encuentra en el Servet. Ambas evolucionan favorablemente.
AFECTA A TRES CURSOS El hecho de que la enfermedad se haya propagado ya por los tres cursos de Infantil hace pensar a los padres que la Consejería de Salud debería haber clausurado antes el colegio. Además, la presidenta de la APA, Silvia Soria, afirmó ayer a este diario que la directora del Josefa Amar y Borbón tuvo conocimiento de los dos primeros casos a través de una familia afectada, una versión avalada por la propia responsable del centro.
"El primer caso se produjo el pasado día 12, y se diagnosticó como un caso sospechoso de meningitis vírica. El 16 llegó la segunda niña afectada al Servet, y al día siguiente fue su profesora la que se interesó por la salud de la alumna y se enteró de que tenía meningitis. Se lo comunicó a la directora y ésta se puso en contacto inmediatamente con el servicio provincial de Educación para saber qué pasaba. Tras algunas gestiones, la dirección se enteró entonces de que había habido un primer caso", relató la presidenta de la APA.
LA OTRA CARA La Consejería de Salud y Consumo tiene otra versión: el día 12 recibió la notificación de un caso sospechoso de meningitis vírica (una enfermedad para la que no hay ningún protocolo de intervención salvo que se deba a un enterovirus, por lo que no hay que comunicar nada al colegio) y el 16, de una posible meningitis bacteriana (que sí supone la activación de una serie de medidas de prevención).
Ese mismo día se confirmó que el primer caso era por enterovirus. Por eso, la DGA garantiza que el 17 se puso en contacto con los responsables del Josefa Amar para que tomaran las medidas pertinentes contra este posible foco bacteriano (es decir, recomendar a los padres que acudieran al pediatra para que recetara quimioprofilaxis a los niños) y contra la vertiente vírica (extremar las medidas de higiene). Entonces se llegó a la reunión del 18, en donde según el Salud se informó a los padres de la situación y de las medidas que debían adoptar.
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