El registro del mantenimiento de las torres hecho público ayer "refuerza" las once reclamaciones presentadas contra el Salud, siete de ellas a cargo de la Asociación para la Defensa del Paciente (Adepa). Así lo aseguró ayer el abogado de estas causas, Ricardo Agoiz, que a partir de ahora defenderá también al médico que denunció la situación de las torres del Clínico, el doctor José Luis Ansón, cuyo informe se incluirá también en el expediente de las dos reclamaciones que existen por vía penal.

Precisamente el facultativo pidió ayer el amparo del Justicia de Aragón ante el "acoso" al que, según dice, le ha sometido el Salud. Asimismo, el nefrólogo exigió ayer al "Ejecutivo" que rectifique y retire la nota de prensa que cuelga de la web oficial del Gobierno de Aragón, en la que se acusa al médico de actitud "obsesiva" y se anuncia el inicio de acciones "administrativas y legales" contra él.

De momento, el nefrólogo no acudirá a la vía judicial contra la Administración aunque no lo descarta, "si no se rectifica en los ataques" contra su honor. Ansón acusó directamente al gerente del Servicio Aragonés de Salud, Antonio Brun, de intentar desacreditarle difundiendo "mentiras y rumores".

CAUSA-EFECTO ADEPA representa en estos momentos a siete pacientes que tienen reclamaciones en la vía administrativa y a otros dos que siguen por vía penal, uno de ellos por el brote ocurrido en junio y el otro, por un episodio anterior de legionela, detectado en este mismo hospital en el mes de febrero.

Además, también lleva las denuncias vía administrativa de otros siete afectados y sus familiares, de los que cuatro fallecieron y otros tres resultaron lesionados. Por último existen otras dos denuncias interpuestas por particulares, al margen de la asociación Adepa.

Agoiz recordó que la normativa sobre legionela establece que la responsabilidad es del titular de la instalación. "Los registros de mantenimiento refuerzan la relación causa-efecto y muestran que la responsabilidad de la Administración es clara e incontestable".

Por su parte Ansón informó ayer de que ha puesto en conocimiento del Salud "la existencia de otros cinco casos, más un sexto" del que informará en breve. El nefrólogo ha defendido desde su primera comparecencia pública la tesis de que "hubo más afectados de los que rebelan las encuestas epidemiológicas oficiales".

Según dice, sólo esto "explicaría por qué falleció el 23,3% de los pacientes", lo que significaría que la legionela ofreció en Zaragoza una tasa de mortalidad "muy superior" a la habitual de otros brotes.