El Gobierno de Aragón recurrirá el plan hidrológico de las cuencas fluviales internas de Cataluña en cuanto lo publique el Boletín Oficial de España (BOE) al considerar que supone un «riesgo cierto» de trasvase y que vulnera el Estatuto de Autonomía aragonés. De este modo, se ratifican en la misma tesis que mantienen desde que el Consejo Nacional del Agua aprobara este plan con el voto contrario de Aragón.

El Consejo de Gobierno de Aragón trató este asunto en su reunión de ayer y el consejero de Presidencia, Vicente Guillén, anunció ese recurso, que tendrá como argumento principal que vulnera el Estatuto de Autonomía, ya que el artículo 72 exige que la comunidad emita un informe preceptivo para cualquier propuesta de obra hidráulica o de transferencia de aguas que afecte a su territorio, y que no ha solicitado el Gobierno de Cataluña.

Guillén subrayó que para el Gobierno de Aragón ese plan contiene un trasvase de aguas y se va a «oponer radicalmente», de forma que tomará todas las medidas que tenga a su alcance para impedirlo.

El portavoz del Gobierno admitió que el Gobierno central ha manifestado que no hay hipótesis de trasvase, pero «eso no es lo que dice el documento que acaba de aprobar el Consejo de Ministros» -el pasado viernes- y por tanto se recurrirá en cuanto lo publique el BOE. Sin embargo, fuentes ministeriales insisten en que en el documento no se desprende ni una palabra de la que pueda deducirse que se pueda realizar en el futuro un hipotético trasvase. Es más, insisiteron contundentemente en que «no se va a trasvasar ni una gota del Ebro a los sistemas de las cuencas internas de Cataluña.

Para Guillén, la argumentación del recurso es «muy sólida» por la jurisprudencia que existe, fundamentalmente por otro trasvase que se intentó en las cuencas de Tajo sobre el que ya se le dio la razón Aragón porque no se había solicitado ese informe previo. En es caso, sí estaba muy claro el trasvase de aguas entre cuencas, del Tajo al Segura.

«El Gobierno de Aragón va a hacer lo posible y lo imposible por impedir cualquier tipo de trasvase» como hasta ahora, dijo tajantemente Guillén.

movimientos en levante / Por otra parte, el nuevo presidente de Murcia, Fernando López Miras, se reunió ayer con los regantes de la comunidad, en uno de sus primeros encuentros oficiales. Estos le expusieron los graves problemas que tienen ante el déficit hídrico que sufre la región y de la reunión salió la necesidad de que se elabore un nuevo plan hidrológico nacional, aunque no mencionó la palabra trasvase. También se acordó impulsar mediante una enmienda de 4 millones de euros a los presupuestos del Estado la desalación, para abaratar el coste de este agua. También pretende un banco público del agua y el blindaje del trasvase Tajo-Segura.