Dinópolis, las estaciones de Valdelinares y Javalambre, así como los monumentos de la capital fueron los principales reclamos para los turistas que eligieron Teruel como destino en el puente. Más de 7.000 personas visitaron Dinópolis --un 70% más que en los mismos días del año pasado-- y unas 6.000 se desplazaron a los centros invernales, principalmente desde Levante. Y aunque la ocupación hotelera rondó el 90% en toda la provincia, en las casas rurales y en la comarca de Gúdar-Javalambre se alcanzó el lleno total. La asignatura pendiente del turismo en Teruel es aumentar las pernoctaciones. Muchos visitantes pasaron un día en la provincia, pero no todos durmieron en los distintos establecimientos.