No es habitual ver a Carlos Tavares, presidente del grupo PSA, pilotar un Opel Insignia GSI a toda velocidad en el trazado largo del circuito de Nordschleife, en Nürburgring (Alemania). Y menos todavía hacerlo con su homólogo en Opel, Michael Lohscheller. Fueron un total de 27 vueltas, que quedaron condensadas en apenas unos segundos -con derrapes incluidos- en un vídeo que se pudo presenciar durante la presentación de este nuevo modelo de la marca alemanan en el Salón del Automóvil de Fráncfort. La imagen no es solo una anéctoda. Es algo más. Es la confirmación de que Tavares ya pilota Opel después de que las intensas negociaciones entre PSA y la marca alemana fructificasen definitivamente con la firma de un acuerdo definitivo el pasado 2 de agosto.

Lohscheller fue ayer el anfitrión en la presentación de la ofensiva de Opel (7 nuevos modelos en el 2017), pero Tavares siguió atento la puesta de largo de estos modelos (el Grandland X, el Insignia GSI y Country Tourer y el Vivaro Tourer, entre otros). Ayer fue la primera vez que los dos compartían escenario en un gran certamen del motor. Ambos incluso pudieron charlar durante más de 15 minutos poco antes de la rueda de prensa de Opel y conversaron algunos minutos con la directora general de Citröen, Linda Jackson. Parecía que se respiraba buena sintonía, conexión entre los líderes del segundo mayor grupo del automóvil en el viejo continente. «Un campeón europeo» como han dicho en repetidas ocasiones.

TRANSFORMACIÓN

El estand de Opel en Fráncfort también reflejaba que el grupo está en plena transformación. La Crossville de Opel -así fue bautizado el expositor de la marca del rayo- tenía en uno de sus frontales un gran cartel en el que se podía leer: Groupe PSA. Uno de los momentos álgidos de la presentación fue la llegada del Grandland X, un modelo en el que, como ha ocurrido con el Crossland X, han compartido miles de horas de trabajo conjunto. Fruto de esa colaboración este último modelo, el C3 Aircross y el futuro Corsa comparten plataforma PSA.

Citröen y Opel también compartieron presencia en el pabellón 8 de la Feria del Automóvil de Fráncfort. Apenas 100 metros separaban los modelos de ambas marcas en uno de los mayores escaparates del sector del automóvil en Europa.

MÁS DE 1.000 EMPRESAS

La jornada de ayer, centrada en la prensa y las empresas del automóvil, reunió a más de 300 medios de comunicación que comprobaron in situ los cientos de novedades que presentaron las más de 1.000 compañías (entre fabricantes y proveedores) que se dieron cita en el certamen alemán.

Tavares, que se ha visto salpicado por las emisiones de gases contaminantes en los motores diésel de algunos modelos de PSA, fue de un lado a otro durante toda la mañana, pendiente de todo lo que ocurría y sabedor de que él era uno de los principales protagonistas de la jornada.

Pero la cita de Fráncfort llega apenas dos meses antes de conocer cuál es el plan que Opel va a poner en marcha para sus plantas europeas, para abandonar los números rojos de los últimos 15 años, para iniciar un nuevo rumbo hacia la rentabilidad. Eso sí, con Tavares al volante.