Las crecidas de los ríos aragoneses se cobraron no solo los importantes daños materiales de siempre sino una vida humana, la de Manuel Lázaro, un pastor de Codos que fue arrastrado por el río Grío anteayer, cuando pastoreaba a sus ovejas. Vecinos, Guardia Civil y Bomberos de la Diputación de Zaragoza le buscaban desde anteayer por la noche, y ayer se confirmó su fallecimiento al ser hallado su cadáver en el cauce, a un kilómetro de su pueblo.

Según explicó el alcalde, Emilio Lorente, la localidad estaba consternada, ya que se trataba de un vecino muy querido. Se daba además la funesta casualidad de que no hacía mucho que se había casado. Con el dolor se entremezclaba el desconcierto de los vecinos, ya que el río se lo llevó a apenas 200 metros de la nave donde guardaba el ganado, una notable cabaña de unas 2.000 ovejas que gestionaba junto con su hermano. Un terreno, por tanto, que conocía sobradamente, sin mencionar su amplia experiencia en el manejo de los animales como pastor. «No entendemos cómo ha podido pasar, ni se sabrá, porque estaba él solo», lamentaba el primer edil.

DESAPARICIÓN / Con el hallazgo del cuerpo, en torno a las 9.00 horas de ayer, se confirmó el desenlace que se sospechaba desde la tarde del jueves, cuando la Guardia Civil recibió, en torno a las 20.00 horas, la primera llamada de un vecino alarmado. Había visto varias ovejas ahogadas arrastradas por el río, y sospechando que eran del fallecido, le había llamado y no le contestaba al móvil. En poco tiempo se estableció un dispositivo de búsqueda que involucró a los vecinos, incluido el propio alcalde. Según explicaba, estuvieron buscándole hasta «las tres o las cuatro de la mañana», cuando se puso a llover y no se pudo continuar el rastreo.

El dispositivo incorporó a bomberos provinciales de los parques de Calatayud, Daroca y Cariñena, además del equipo de guías caninos de la DPZ, y por parte de la Guardia Civil, además de patrullas de la zona, se unió de forma voluntaria el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de Huesca. Entre ellos, los voluntarios de Protección Civil y los vecinos de Codos y otros municipios cercanos, rastrearon un tramo de unos 7 kilómetros de río.

La búsqueda se reanudó a primera hora de la mañana, y a las 9.00 horas, cuando el nivel del río había bajado un metro el nivel, fue hallado el cuerpo en el cauce. El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA) para practicarle la autopsia, y ayer en Codos todavía no se sabía cuándo se oficiará el funeral.

El consistorio celebró ayer un pleno para aprobar el decreto de días de luto oficial por el fallecimiento del vecino, que según insistió el primer edil era muy apreciado en la localidad zaragozana y en la zona. También fue prueba de ello la presencia toda la noche del presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, también en su condición de alcalde de la cercana localidad de Tobed.