Los costes operativos y comerciales de las compañías de bajo precio son un 50% más reducidos que los de sus competidoras tradicionales, que ya emulan a éstas. Fuentes de Iberia admiten que estas compañías "han revitalizado el mercado", empujando a las aerolíneas tradicionales a hacer cambios. "No dan nada a bordo y lo cobran todo, utilizan aeropuertos más baratos, venden los billetes sin que medien agencias y usan en mayor medida las flotas y las plantillas, que, para algunos servicios, se subcontratan", destacan estas fuentes de Iberia.