Como precedente de la gala nocturna de los Premios Max, el Principal acogió ayer por la mañana un acto en el que se homenajearon las artes escénicas con la entrega de los maximinos de honor a Angel Anadón, Mariano Cariñena, María de Avila y a los Titiriteros del Binéfar. El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, afirmó que esta gala sirve "para demostrar nuestro amor por las artes escénicas y también para promocionar la ciudad". Rosa Borraz, concejal de Cultura del Ayuntamiento, fue un paso más lejos aún: "Queremos que el día de hoy (por ayer) no sea un fogonazo de gran intensidad y luego quede en nada, sino que tenga un significado importante y que se pueda apreciar el compromiso de Zaragoza con la cultura". En este orden, recibieron los distintivos los Titiriteros del Binéfar de la mano de Joaquín Murillo, Angel Anadón de Pilar Laveaga, Mariano Cariñea de Antón Castro; y María de Avila de Ana Rioja.

El acto fue presentado por Carlos Blanco, y estaba patrocinado por el Ayuntamiento de Zaragoza, la Sociedad General de Autores Españoles y la Fundación Autor. A la gala acudieron también diversos representantes de la cultura, como el viceconsejero de Cultura de la DGA, Juanjo Vázquez, o el productor ejecutivo de la SGAE, Eduardo Bautista.