Los trabajadores del sector de hostelería de Zaragoza están en pie de guerra. Su convenio provincial sigue bloqueado tras nueve meses de negociación, por lo que los sindicatos han convocado una huelga para el día de Nochevieja. Además, la "negativa" de la patronal a retomar las conversaciones llevó ayer a los delegados de CCOO, UGT y OSTA a iniciar un encierro "indefinido".

Actualmente, y según explican las centrales, hay dos aspectos que hacen que las posturas sigan muy alejadas en el nuevo convenio, que estaría vigente para 2011 y 2012 y afecta en la provincia a unos 18.000 trabajadores. Por un lado, las discrepancias hacen referencia a los incrementos salariales: los sindicatos reclaman el mantenimiento del poder adquisitivo, mientras que la patronal plantea congelar los sueldos en 2011 y una subida del 1,5% para 2012 pero sin revisión. Además, los empresarios quieren reducir los complementos por baja laboral.

Las partes celebraron su última reunión a principios de noviembre. "Deben ser responsables y sentarse a hablar", apuntó ayer el responsable del sector en CCOO, Emilio Alloza. La huelga de 24 horas comenzaría a las 7.00 del sábado y pondría en peligro la celebración de cotillones en bares y restaurantes.