Además del claro y conocido objetivo de derogar y modificar el Impuesto de Contaminación de las Aguas (ICA), desde Podemos-Equo proponen que aplicar el lema de que pague más el que más tiene. Es lo que harán, por ejemplo, con el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) que se lo congelarán a las viviendas y comercios de proximidad. Lo mismo harán con las tasas, tarifas y precios públicos (agua y basura y construcción para adaptación bioclimática y accesibilidad física) que los adaptarán a las rentas de las familias. En el lado opuesto, prevén aumentar el IBI de los inmuebles no residenciales de valores catastrales más altos a excepción de los de uso industrial.

Para fomentar la cultura, proponen la creación de una nueva ordenanza fiscal con el fin de establecer nuevas tarifas en los teatros públicos de Zaragoza. Un idea que quieren aplicar también en el cine, estableciendo exenciones culturales a la producción y el rodaje de metrajes no publicitarios. En cuanto a las plusvalías, la formación quiere mantener las bonificaciones para las personas más desfavorecidas.

La recaudación servirá para ir disminuyendo progresivamente la deuda que acumula el consistorio que harán «sin la necesidad de llevar a cabo recortes en políticas sociales ni en la prestación de los servicios públicos municipales», aseguran. Del mismo modo, se proponen seguir reduciendo el plazo medio de pago a proveedores.

Entre sus planes entra la utilización de la figura de las subvenciones plurianuales reguladas en la ordenanza general municipal y bases reguladoras de subvenciones del ayuntamiento y su sector público con el fin de «dar estabilidad a las entidades beneficiarias y evitar los problemas derivados del retraso en la aprobación de los presupuestos municipales», algo que suele suceder en el consistorio.