Un discurso es impune si no se compara. El discurso de Rudi no aguanta un mínimo contraste con la realidad. Su optimismo cósmico deriva de la fanfarronería de Aznar y del cinismo de Rajoy. Oyendo a Rudi uno duda de si miente o se cree lo que dice. Ha constatado el "final de la crisis" y ha añadido que Aragón aún está mejor que la media española. No solo no hay final de la crisis sino que hay que aclarar que Aragón ha mantenido tradicionalmente una situación algo mejor que la media nacional. Pero esta ventaja va disminuyendo con el Gobierno de Rudi. Solo un ejemplo: la desigualdad está creciendo el doble de rápido en Aragón que en España (6,5 puntos en Aragón, 3,1 en España) y el riesgo de pobreza y exclusión social (7 puntos en Aragón y 2,5 en España).