Uno de los asuntos que ya figura en el orden del día facilitado por el Gobierno de Aragón al Ayuntamiento de Zaragoza afecta a una nueva tranferencia de competencias que están relacionadas con el área de Medio Ambiente y con Turismo. Aunque algunas de ellas ya se vienen realizando de forma habitual desde hace tiempo, toca formalizar el traspaso de poderes al respecto en base al acuerdo alcanzado con la ley de capitalidad de Zaragoza. Una de ellas es la necesidad de que sea el consistorio quien asuma la supervisión e inspección de los nuevos alojamientos turísticos en la ciudad, aquellos que tienen que ver con la regulación que se tiene que empezar a aplicar con sistemas como Airbnb, que sirven para que particulares ofrezcan sus hogares para alojar a visitantes de la capital aragonesa. El ayuntamiento asumirá ese rol. Otra competencia que no es tan nueva es la de asumir la capacidad de conceder autorizaciones mediambientales que hasta ahora debía emitir el Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) en el municipio. Algo que ya se viene haciendo en Medio Ambiente.