La estación intermodal de Delicias sigue inacabada un año y medio después de su inauguración. La situación provocará que los pasajeros tengan que acostumbrarse de nuevo a pasar frío este invierno porque la tercera fase de obras, la de mejoras y remates, aún debe ejecutarse y ni siquiera ha salido a licitación. Los anteriores responsables del Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF) no tenían cuantificado oficialmente el importe de las obras, aunque sí el plazo máximo para su ejecución: dos años. De esta forma, los acabados y la urbanización del entorno del complejo deberán esperar hasta el 2007 para ser una realidad.

En el listado de trabajos pendientes se incluye mejoras en los sistemas de climatización y extracción de humos y en la iluminación, la conclusión de cerramientos y arreglo de pavimentos. También se instalará un ascensor para comunicar directamente el aparcamiento sur --el único abierto-- y el vestíbulo de salidas con el fin de evitar los trasiegos con maletas tan cuestionados por los viajeros.

Estas actuaciones darán respuesta a las quejas de los usuarios, que el año pasado criticaban especialmente el frío reinante en la estación. Para ello, se prevé instalar cortinas de aire caliente en los extremos de los andenes y puertas de cristal en el vestíbulo subterráneo y el aparcamiento. El objetivo es que la temperatura ambiente ronde 20 grados.

La tercera fase de Delicias no incluye el remate de la terminal de autobuses. La estructura está lista desde el verano del 2003, pero el GIF y la DGA discutieron durante meses cómo se repartían el coste de los últimos trabajos. Se han puesto de acuerdo, pero ahora les separa la cesión de las instalaciones. La demora impedirá que los buses utilicen las instalaciones, como mínimo, hasta el próximo verano.