El coordinador general de Izquierda Unida Aragón, Álvaro Sanz, anunció ayer que, «salvo sorpresa» del voto telemático, la militancia del partido ha apoyado la confluencia con Podemos y Equo para concurrir juntos a las elecciones generales del próximo 28 de abril.

Según explicó, en declaraciones a los medios recogidas por Efe, el voto en urna en la consulta para respaldar la confluencia con Podemos, Equo y «otras fuerzas políticas de izquierda», que terminó anteayer, confirmaría la «tendencia» de la militancia de IU que, subrayó el coordinador general, apostó siempre por la unidad «en todos los ámbitos». En este sentido, después de que se conozcan hoy los resultados definitivos de la votación interna, miembros de IU iniciarán conversaciones con CHA para que se sume a esta gran confluencia de izquierdas para las elecciones generales.

Respecto a las elecciones autonómicas, Sanz aseguró que en su formación siguen «abiertos al diálogo» con Podemos Aragón para concurrir juntos a los comicios del 26 de mayo, pero que fue Podemos quien «se levantó de la mesa» y, por tanto, deben ser ellos quienes reanuden el diálogo.

Preguntado por la carta que publicó en su blog el pasado 7 de marzo el secretario general de Podemos Aragón, Nacho Escartín, en la que tachaba de «inasumibles» las pretensiones de IU para ir juntos a las autonómicas y pedía a la formación izquierdista una nueva propuesta, Sanz contestó que una carta en un blog es un artículo de opinión y que ellos valoran «hechos concretos, no epístolas».

Sin embargo el largo texto de Escartín en su blog, pese a que formalmente no cerraba la puerta a la confluencia, dibujaba un panorama en el que difícilmente se van a poder alcanzar acuerdos con Izquierda Unida a nivel autonómico y municipal en Aragón, al no aceptarse las propuestas «generosas» de la formación morada. De hecho, el secretario general del partido en Aragón explicitaba que contaba con el aval de Pablo Iglesias en cuanto a que, si se avanzaba en la negociación, tendría que ser por la cesión de otros partidos.

Escartín detallaba cómo IU había pedido en las negociaciones tener el número 2 en listas provinciales, así como los números 4 y 6 en Zaragoza. Algo «inasumible» para Podemos, que cedía otros puestos más atrasados en la lista pero teniendo en cuenta que, en los últimos comicios, Podemos obtuvo casi un 21% de los sufragios (lo que se tradujo en 14 diputados) e Izquierda Unida un 4%, por lo que Patricia Luquin fue su única representante.