En las últimas recomendaciones a España, la Comisión Europea ha vuelto a reiterar la necesidad de aumentar los impuestos indirectos (IVA) y medioambientales para cuadrar las cuentas. También lo han reclamado el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE).

Todos estos organismos internacionales sostienen que España no tiene margen para rebajar impuestos debido a los profundos desequilibrios macroeconómicos. Existen serias dudas sobre la capacidad del Gobierno de cuadrar el déficit en el 2015 si se acomete una fuerte reducción de los impuestos y, por tanto, de los ingresos.

Sin embargo, el Gobierno de Mariano Rajoy niega de forma reiterada que vaya a a subir el IVA --ya lo aumentó en el 2012-- u otros impuestos indirectos. Lo que ayer confirmó el Ejecutivo fue un incremento del IVA sanitario para cumplir con una sentencia del Tribunal de la Unión Europea (UE) y armonizar este impuesto con la media europea.

El gravamen pasará del actual tipo reducido del 10% al tipo general del 21%. Pero esta subida no afectará a determinados productos de uso habitual de las familias como gafas, lentillas y tiritas, según confirmaron ayer fuentes del Gobierno. La intención del Ejecutivo es limitar el impacto de la medida en el consumidor final.

Ayer no se detallaron los materiales que subirán del 10% al 21%, aunque en principio se prevé que el alza afecte a la mayoría de productos utilizados por los hospitales y los profesionales que ejercen de manera independiente. Eso afecta a escáneres, TAC, aparatos de rayos X, pasando por el mobiliario y equipamiento para centros sanitarios. También pueden sufrir el alza las vendas, apósitos, jeringas, termómetros clínicos, guantes estériles, protectores para callos y juanetes, mercromina o agua oxigenada.

Esta medida será un duro golpe para las autonomías, ya que el coste sanitario, con la educación, es la primera partida de los presupuestos de los gobiernos autonómicos. Son ellas las que costean este tipo de inversiones y gastos en las infraestructuras sanitarias públicas.