Javier Tebas, presidente de LaLiga, instigadora de la denuncia que desató la investigación, recogió las medallas correspondientes en medio del conflicto que mantiene abierto con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y contestó al anuncio federativo de que se personará como acusación particular en el caso.

«Fue lo contrario a un día negro porque demuestra que luchamos contra la delincuencia. Es un día para felicitar a la policía y a LaLiga», explicó Tebas, visiblemente satisfecho, antes de atacar al enemigo: «Esperaba más unión con la Federación en la investigación de este problema. Nos hemos ofrecido a trabajar conjuntamente, pero no hemos tenido mucha respuesta», aseguró.

De este modo, Tebas sacó pecho ante la RFEF, que también quiso que le reconocieran el mérito de la operación: «En el caso del partido que enfrentó a la SD Huesca y al Nástic se puso en marcha de manera inmediata este procedimiento hace ya más de un año», señaló en un comunicado. «Al día siguiente, se elevó la propuesta del instructor de suspender el procedimiento al entender que existían indicios suficientes para trasladar estos hechos al Ministerio Fiscal, ya que podían ser constitutivos de delito o falta penal», agregó el organismo presidido por Rubiales.