Que Zaragoza sea «capital compartida» de España. Es la propuesta rompedora que lanzó ayer el presidente de Aragón y candidato socialista a la reelección, Javier Lambán, en la Fiesta de la Rosa del PSOE zaragozano, celebrada en el parque de atracciones. Se trataría, según explicó, de que la capital aragonesa, al igual que otras grandes urbes como Valencia; Sevilla o Bilbao, acoja sedes de agencias, ministerios y partes de la Administración General del Estado con el fin de que «las oportunidades de riqueza y empleo que ahora acapara Madrid se distribuyan entre todo el territorio». La idea, que ya dejó caer en un acto hace un mes con el presidente Pedro Sánchez, fue definida por el mandatario aragonés como un segundo proceso de descentralización tras la cesión de competencias estatales hacia las autonomías que se produjo hace 40 años.

El mitin, en el que se dieron cita 1.500 personas, marcó el pistoletazo de salida de la carrera hacía la triple cita electoral del 26 de mayo, aunque la campaña comenzará oficialmente el próximo viernes, y contó como invitado especial con el presidente electo de la Comunidad Valenciana y secretario general del PSPV-PSOE, el socialista Ximo Puig. También intervinieron la candidata del PSOE a la alcaldía de Zaragoza y el secretario general provincial y presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), Juan Antonio Sánchez Quero.

«Vox quiere acabar con el Estatuto de Autonomía y Ciudadanos y el PP no le van demasiado a la zaga», advirtió Lambán, que apeló a la defensa del autogobierno, que a Aragón «le ha ido de maravilla», frente a la tentaciones recentralizadoras de la derecha.

A su juicio, España «estará más unida y cohesionada» cuanto más desarrolle el Estado autonómico, el cual ha permitido que una comunidad «postergada» en la historia como Aragón sea hoy líder en innovación, economía o ciencia. «La unidad de España no solo se defiende oponiéndose a la independencia de Cataluña sino también evitando brechas de desigualdad entre las zonas pobladas y despobladas», afirmo.

Defender a Pedro Sánchez

Esta fue una de las «razones de peso» que dio para llenar las urnas del 26-M con un «aluvión de puños y rosas» y reeditar así la movilización del voto progresista y de izquierdas que se produjo en la pasada cita electoral del 28 de abril, en la que vencieron los socialistas resultaron tanto a nivel autonómico como nacional.

«Hemos de hacer -para el 26- M- el mismo esfuerzo de movilización o más si cabe. Es mucho lo que está en juego», remarcó. Y aunque la derecha está «rabiosa» y «desunida» por la lucha que libran PP, Ciudadanos y Vox por el liderazgo de este flanco político, el candidato socialista pidió «no llevarse a engaño» porque «con quien realmente quieren acabar es con el PSOE».

Otro de los motivos que esgrimió para votar a los socialistas en los comicios municipales, autonómicos y europeos es defender el Gobierno de Pedro Sánchez, ya que la derecha quiere utilizar estas elecciones como «revancha» de las pasadas generales. «No tienen proyecto para Aragón ni para Zaragoza, pero están rabiosos porque han pedido el poder y quieren el 26 de mayo como revancha para utilizar las instituciones autonómicas y municipales como ariete contra el Ejecutivo central», argumentó.

También pidió apoyar al PSOE para defender el Estado de Bienestar, que ve en riesgo si la derecha vuelve al poder en la DGA. En este capítulo, hizo una defensa encendida de la consejera de Educación, Mayte Pérez, que «ha sido el oscuro objeto de deseo de la derecha. Han querido acabar con ella y se ha cebado». Así lo señaló para aplaudir la apuesta de la DGA por hacer un colegio público, pese a la reciente sentencia en contra por denegar la apertura del centro concertado Anfora.

Por su parte, Pilar Alegría instó a repetir la «movilización masiva» del 28-A porque «este partido no ha terminado y esa derecha puede llegar a aquí, a Aragón». «Nos estamos jugando tener un Ayuntamiento de Zaragoza que esté gobernado con seriedad y solo el PSOE es capaz de presentar un proyecto solvente, sólido, que cuide a la gente», aseguró, al tiempo que advirtió del riesgo de una alianza de Vox con PP y Cs en este consistorio.