Estamos preparados. Ya se está enviando información de los nuevos créditos a los notarios. Pero es posible que en los primeros días el ritmo de firmas de hipotecas sea mucho menor que hasta ahora». Lo explican fuentes del Banco Santander, uno de los mayores bancos españoles y de los que han realizado pruebas desde el primer momento con la plataforma (pasarela) tecnológica mediante la que los notarios deben aportar la información precontractual a los clientes de los bancos que solicitan un crédito hipotecario.

Pero eso será a partir de agosto, porque, tal como publicó anteayer el Boletín Oficial del Estado (BOE), el Gobierno ha aprobado una moratoria de un mes y medio para que se tenga que utilizar de forma obligatoria el sistema digital para conectar a bancos con notarios para transmitir la información que necesitan los clientes para firmar un crédito hipotecario ¿Qué ha ocurrido y qué efecto tendrá ese retraso en la aplicación de la nueva ley? Bancos y notarios ya daban por hecho que la aplicación de la ley se hará a paso lento. «Lo normal es que los trámites comiencen a realizarse a partir del hoy y que por lo tanto haya un par de semanas con menos contratos firmados de lo habitual», señalan desde el colectivo profesional de notarios. Con más razón habrá que pensar que la vuelta a los procedimientos tradicionales que permite la moratoria ralentizará más los procedimientos que establece la norma, puesto que la ley entra en vigor de todas formas.

La plataforma comenzó a funcionar el pasado 3 de junio y, desde entonces, las entidades financieras han comenzado a adherirse. «Hay ocho bancos que ya lo han hecho», afirman desde el Colegio del Notariado, lo que quiere decir que esas entidades ya han estado enviando información sobre sus operaciones. Y es posible que a partir de esta lunes ya puedan firmarse algunas hipotecas. «Pero pocas», apuntan desde una entidad financiera. «Por lo que vemos, el grado de adaptación de la documentación a la nueva ley no es homogéneo» añaden.

Fuentes de Ibercaja reconocen que han tenido que trabajar contra reloj para adaptarse a la plataforma tecnológica de los notarios y poder transmitir así la documentación de los préstamos, pero confían en que no se producirán retrasos en la firma de hipotecas ni un colapso del sistema. «Si hay fallos puntuales siempre se podrán buscar fórmulas alternativas», indicaron. Con todo, para curarse en salud ante eventuales problemas, el banco aragonés, como otras muchas entidades, han adelantado todo lo que han podido los nuevos créditos concentrándolos en la primera quincena de junio.

TODOS CONECTADOS

El decano del Colegio Notarial de Aragón, Dámaso Cruz, asegura que la obligación de transmitir «por medios telemáticos seguros» la información precontractual de los préstamos ayudará a «agilizar» el sistema. «La novedad formal de la ley también va a ser importante», subraya.

Pero la realidad es que el sector financiero, contra la opinión de los notarios, temía que el sistema tecnológico elegido por estos funcionarios --un sector con un nivel de digitalización menor-- no fuera capaz de resistir la conexión de todos los bancos a la vez. «No es lo mismo una prueba que todas las entidades estén tramitando la información por el sistema. Había riesgo de que se colapsara a partir de hoy. Y esa es la razón por la que la Justicia ha decidido aplicar la moratoria», comentan fuentes financieras.

La propia dinámica de la nueva legislación establece que hay que visitar al notario dos veces y que habrá un plazo de diez días para el periodo precontractual en el que estos tienen que verificar la información facilitada por los bancos, tras el cual puede firmarse el contrato de préstamo. Es decir, para que las hipotecas pudieran firmarse hoy, la documentación debería haberse entregado el 7 de junio, lo que reduce las posibilidades de que se produzcan firmas esta semana.

CONFIAR EN LOS OTROS

La Asociación Española de Banca (AEB) deja entrever cierto escepticismo en este comentario: «Con la información de la que disponemos, los bancos han adaptado sus procesos y por tanto están totalmente preparados para cumplir la nueva norma. Confiamos en que el resto de los intervinientes también lo estén», resalta la asociación patronal.

Mientras las entidades han estado en modo de prueba con la nueva ley, han procurado acelerar los procesos con la normativa antigua con la firma de las hipotecas que estaban en proceso avanzado de negociación. «Hemos batido récords en estas últimas semanas. Estamos intentado anticipar la firma de contratos antes de que entre en vigor la ley», reconocen en el sector. Es algo en lo que parece que el cliente también ha estado interesado. «Si tienes que firmar, lo normal es que quieras cerrar la operación con anticipación a los cambios normativos», dicen desde el Santander.