Los escaparates de la ciudad hace ya días que han traído este año, un tanto adelantada, la Navidad. Y con ella, las campañas publicitarias, los anuncios de lotería, la iluminación navideña y, cómo no, la ilusión por los regalos. Aunque las jugueterías admiten que aún es pronto para saber los productos que romperán el mercado este año, todo apunta a que los niños zaragozanos se inclinarán por la colección de Los Lunnis, el Robosapiens, Spiderman y el merchandising de la película Los Increíbles que estrenará Walt Disney el próximo viernes.

"En Zaragoza, el puente de la Constitución marca habitualmente el pistoletazo de salida para las compras de la Navidad, que se afianzan con el cobro de la paga extra. Pero ya se pueden intuir algunas de las tendencias de este año", aseguran desde la planta de juguetes de El Corte Inglés.

Los profesionales del sector consultados intuyen el descenso en las ventas de los videojuegos y lamentan la falta de auténticas novedades, ya que la gran mayoría del producto es sólo un desarrollo de las líneas anteriores.

"El Robosapiens es lo más nuevo. Se trata de un robot, con mando a distancia, que ejecuta hasta 70 funciones distintas. Baila, pinta, anda... y su precio ronda de 114 a 120 euros. También están las muñecas Bratz, y, por supuesto, Los Lunnis, que ha sido el plato fuerte de todo el año", añaden desde Juguettos.

"Sólo si los profesores recomiendan a los padres que compren juegos educativos, puzles y parchís es cuando estos productos se venden. Lamentablemente, los niños sólo piden lo que ven en televisión, y los padres, por comodidad y rapidez, se lo compran", afirma el dueño de un pequeño comercio especializado en juguete educativo.

Cada vez es mayor la tendencia a adquirir películas infantiles de vídeo y DVD, como Buscando a Nemo o Sherk , así como todos los complementos de las nuevas producciones que llegan al cine; y, en el lado opuesto, permanece de manera casi anecdótica el juguete bélico.

En cuanto a precios, todos coinciden en que existe un estancamiento de los mismos, con excepción de las novedades. Y en cuanto al mercado, a pesar de los informes que revelan la predilección de los niños por los juguetes y la compra masiva de éstos, los jugueteros lamentan la fase de recesión en la que se encuentran.