Con el fin de controlar la afluencia y prevenir posibles actos xenófobos, los responsables de la mezquita de Madrid --situada al lado de la M-30-- han decidido extremar las medidas de seguridad en el interior y el exterior del centro islámico, el más grande de Europa, en el marco de una operación coordinada con la policía y el consistorio madrileño.

Mohamed el Afifi, portavoz del centro, explicó ayer que los responsables de la mezquita se encargarán del control de movimientos en el interior del edificio, mientras que "el Ministerio del Interior se hará cargo de lo que le corresponde". Mohamed Saleh, secretario del centro islámico, precisó por su parte que durante los últimos días se han producido varios contactos con autoridades policiales españolas, y que fruto de esas reuniones se ha tomado la decisión de reforzar las patrullas en la zona.

"Es por el bien de todos", manifestó Afifi en referencia a los controles que a partir de ahora se llevarán a cabo en el interior de la mezquita. "No al terrorismo, nuestra solidaridad con las víctimas y sus familiares", se leía ayer en un cartel pegado justo a la entrada del centro.

PREOCUPACION El portavoz aprovechó la visita de varios medios de comunicación para pedir "información rigurosa y que dejen que las investigaciones sigan su marcha". Sobre el manejo de la información por parte de los medios también habló el secretario de la mezquita de Tetuán, Helal Aboshi, preocupado por algunas afirmaciones que apuntan a que "uno de los detenidos venía a esta mezquita para captar a la gente". "He hecho una pequeña encuesta a las personas que más frecuentan este centro y afirman desconocer a ese hombre", manifestó. Aboshi, reconoció que entre la comunidad musulmana "hay un poco de preocupación, pero no miedo".

De otro lado, el Ayuntamiento de Reus (Tarragona) lamentó y condenó las pintadas de tipo racista y xenófobo que aparecieron ayer en el polígono Dyna donde se instalará una mezquita. Los vecinos se oponen a esta instalación y, por eso, han convocado una manifestación para el próximo lunes ante el ayuntamiento. El teniente de alcalde, Eduard Ortiz, pidió "responsabilidad", sobre todo a los grupos políticos, especialmente al portavoz popular Miquel Angel López Mallol, que incitó a esta manifestación durante una reunión con los vecinos.

Ortiz señaló que si hubira incidentes "se podría hacer responsable al propio Mallol".