La ola de apoyos a la huelga estudiantil por el clima organizada para hoy por el movimiento Fridays for Future no deja de crecer, especialmente entre el mundo científico. Primero fueron 12.500 académicos de Alemania, Austria y Suiza los que presentaron el martes en Berlín un manifesto de apoyo a la protesta encabezada por la sueca Greta Thunberg. Luego, el miércoles, más de 250 miembros de distintas disciplinas y universidades españolas hicieron pública una carta de respaldo. Y ayer fueron 250 científicos de universidades públicas y privadas estadounidenses los que avalaron las propuestas de los jóvenes. «Necesitan nuestro apoyo, pero más que eso, necesitan que nosotros actuemos. Su futuro depende de ello», advirtieron.

Una de las peticiones más reiteradas por los jóvenes activistas es que los políticos escuchen a los científicos. No piden nada extravagante, aseguran. Solo lo que ha dictaminado la ciencia. Y en justa correspondencia, los expertos parecen haber visto en esta revuelta el rayo de esperanza que se necesitaba frente al inmobilismo de muchos países y sectores económicos.

Entre los políticos españoles el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, juzga «importante» esta movilización. También la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, dio las gracias a la activista sueca «por iniciar un movimiento precioso para proteger la salud del hogar que compartimos».