El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se sacó ayer de la manga una nueva medida de financiación para contentar a las cuatro comunidades que no se acogieron al fondo de liquidez autonómica (FLA) y se sentían agraviadas ante las ventajas que este ofreció a las que sí lo hicieron. Aragón, Galicia, Castilla y León y Madrid entrarán a formar parte de un fondo bautizado como de "facilidad financiera" que les permitirá obtener financiación del Estado sin intereses y a devolver en diez años. Este fue el principal acuerdo al que se llegó en la última reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera que reúne al Gobierno central con todas las comunidades autónomas.

De este modo, y esta era una de las exigencias del consejero de Hacienda del Gobierno de Aragón, Javier Campoy, el ministerio compensa a aquellas comunidades que tenían problemas de tesorería pero que se financiaban de forma óptima en mercados que no eran los ofertados por el Estado y que hacían perder autonomía financiera a las comunidades. Campoy estimó en unos 300 millones de euros el dinero que obtendrá de este nuevo fondo, lo que le permitirá satisfacer todas esas necesidades de tesorería.

AHORRO

Por otro lado, el Gobierno de Aragón se ahorrará 35 millones de euros de las liquidaciones negativas de los ejercicios 2008 y 2009, otra decisión beneficiosa para las arcas autonómicas que se ha planteado hoy en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Hay que recordar que los errores de cálculo del Gobierno central en aquellos ejercicios supusieron una sobrefinanciación a Aragón de más de 900 millones, que la comunidad debe devolver de forma aplazada. En este caso, el Ejecutivo central condona a Aragón, y a otras autonomías no adscritas al FLA, los 35 millones que corresponderían a la anualidad del 2015 por estos aplazamientos.

El consejero Campoy mostró su satisfacción al término de la reunión. Consideró "muy interesante" la propuesta del ministro después de varias semanas de tensión entre las dos administraciones. Asimismo, indicó que el Departamento de Hacienda "estudiará en profundidad" las condiciones del acuerdo al que, con toda seguridad, se va a acoger.

Otro de los asuntos que se abordó ayer en la reunión es el reparto entre las comunidades autónomas de la recaudación del Impuesto sobre los Depósitos en las Entidades de Crédito. Aragón ingresaría una cantidad cercana a los 6 millones de euros por este tributo, que pagan las entidades financieras en todo el país. Un ingreso que supone una inyección extra para las arcas autonómicas, puesto que no estaba previsto en el presupuesto, pero que finalmente beneficiará a todas las comunidades gracias a los recientes cambios en la regulación de este impuesto.

No solo Aragón manifestó su satisfacción por la oferta ministerial. Algunas de las comunidades que tradicionalmente muestran sus reticencias, mostraron ayer su visión positiva respecto a los términos de la reunión de ayer. Es el caso de Cataluña, cuyo consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, dijo que la iniciativa es positiva y "está bien", aunque aclaró que no existe una "idea cuantitativa de sus efectos" en las arcas públicas autonómicas, según indicó Efe. Cataluña es actualmente una de las que más fondos percibe del FLA, junto con la Comunidad Valenciana y Andalucía.

Tras la celebración del consejo, el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, indicó que el beneficio que obtienen las comunidades en relación con la aplicación de tipos es de 4.312 millones para 2015. De este modo, el ministerio consiguió ayer contentar prácticamente a todos, salvo a la Comunidad de Madrid que siguió criticando el acuerdo.

Este acuerdo llega casi a final de legislatura y es prácticamente un parche después de que Montoro descartara hace unos meses reformar el modelo de financiación autonómica, tal y como prometió al inicio de gobernar. Las distintas visiones y necesidades de las comunidades autónomas, que piden criterios distintos para hacer el reparto, propiciaron que el ministro guardara en un cajón la reforma.