El aumento de las viviendas previstas en el barrio de AVE y en El Portillo y la financiación a cambio de parte del metro de Zaragoza, anunciada por el consejero delegado de la entidad que gestiona el desarrollo de este sector, Andrés Cuartero, desencadenó ayer un nuevo episodio de desencuentro entre los socios de Zaragoza Alta Velocidad (ZAV). Los responsables políticos del consistorio desdijeron a Cuartero y negaron que exista acuerdo para ampliar la recalificación acordada --3.150 pisos junto a la estación de Delicias, a los que se añadirían 535 entre esta zona y El Portillo-- o para financiar la primera línea de suburbano, mientras la DGA defendía la construcción, cuanto antes, de este nuevo servicio de transporte.

Desde la oposición, PP y PAR echaron leña al fuego calificando de "especulador" al Gobierno municipal PSOE-CHA y rechazando que se recalifiquen más pisos "para beneficiar a otras instituciones".

Ayuntamiento y DGA adjudicaron en octubre el estudio informativo de la primera línea de metro o tranvía de Zaragoza, que transportará viajeros de norte a sur, pero curiosamente el trazado para el que ZAV propone fondos es el que va de este a oeste --une la estación con el centro--; sobre este corredor no hay informes previos.

La reacción más virulenta ayer fue la del alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, que ha puesto todo su empeño en integrar el proyecto de la Milla Digital en el plan del barrio del AVE y se ha encontrado con una tibia aceptación de sus demandas por parte de los socios de ZAV --Fomento y DGA-- y de Cuartero.

En un comunicado público, Belloch recuerda al consejero delegado que no es ZAV, sino el consistorio, quien decide sobre el planeamiento y el diseño de la ciudad. "El ayuntamiento, como socio de Zaragoza Alta Velocidad, no se considera en modo alguno representado por las manifestaciones del consejero de la misma", machacó el alcalde.

Belloch dejó claro, además que no hay acuerdo sobre el metro. "El problema no es quién lo financia, sino quién subvenciona el billete. Y hasta el momento nadie se ha mostrado dispuesto a afrontar ese coste", advirtió.

En un sentido similar, pero con menos énfasis, se manifestó el teniente de alcalde de Urbanismo, el nacionalista Antonio Gaspar. Pese a que se mostró de acuerdo "con muchas de las cosas que dice Cuartero", insistió en que no existe acuerdo alguno. Para que lo haya, sugirió, otras instituciones --como Fomento y DGA-- deben comprometerse directamente en la financiación del proyecto.

Antes de que se hiciera público el contundente comunicado del alcalde, el presidente aragonés, Marcelino Iglesias, defendía durante una visita a Huesca el proyecto de metro para Zaragoza. Junto con Renfe y con el consistorio, explicó, la DGA está dispuesta a abordar este medio de transporte en el 95 y el 96.