El conflicto de los despidos de Autobuses Urbanos de Zaragoza (AUZSA) dio ayer otro paso hacia su resolución, aunque sea a medio plazo. Hasta finales del año que viene, previsiblemente, no se reincorporarán los 125 trabajadores despedidos forzosamente por la empresa --uno ya lo ha hecho--, pero la fijación de los recorridos parece que acelerará los pasos. Así al menos lo aseguraba ayer la portavoz de la empresa. El consistorio materializó sobre el papel su promesa de añadir 500.000 kilómetros para ayudar a resolver el conflicto de los despidos y poner fin a la huelga.

La empresa mostró cierto optimismo, aunque no veía "ni buena ni mala" la propuesta del consistorio. En primer lugar, porque al menos hasta bien entrada la tarde no la había recibido. En segundo, porque no tienen nada que valorar sobre ella. "Somos la concesionaria, y haremos lo que diga el concedente", expusieron desde la entidad.

El presidente del comité de empresa de AUZSA, Javier Anadón, se mostró cauto sobre el impacto que podría tener la restructuración en el empleo, al no tener todavía los cuadros de trabajo que debe confeccionar la empresa. "Hasta que no sepamos cómo diseña estos cuadros no podemos hacernos una idea de cómo se producirán las reincorporaciones y cuántas serán", indicó Anadón, quien no entró a valorar la nueva reordenación de líneas. Eso sí, indicó que "tantos cambios en tan poco tiempo están afectando a la calidad del servicio".

NECESIDADES Para la empresa, "las medidas dan respuesta a las demandas vecinales y a las necesidades de kilometraje del compromiso del ayuntamiento", expuso. A priori, el tener este extra de kilómetros aceleraría pues el proceso de reincorporación de los trabajadores despedidos. Pero este no será inmediato. La citada portavoz aludió a la planificación necesaria para un cambio que afecta a tantas líneas de transporte urbano. "Pese a no haber tenido comunicación, los técnicos de planificación están trabajando desde esta mañana (por ayer), cuando ha saltado la noticia, para comprobar las necesidades de los nuevos recorridos", expuso. Estos cálculos incluyen los tiempos o los autobuses necesarios para cubrir cada línea con su frecuencia.

Por su parte, Javier Anadón consideró que ahora se hace necesario que todos los acuerdos que se adopten deben ser ratificados a tres bandas. Por ello, deseó que el consistorio se reúna en los próximos días con la empresa y con el comité de los trabajadores, para sellar ese acuerdo. Mientras, los empleados seguirán a la espera de conocer las condiciones de la reincorporación de los puestos que habían sido despedidos en agosto.