Otra de las variaciones destacadas en el presupuesto del 2015 es la cuantía destinada a las las operaciones y servicios de la deuda (la amortización de capital e intereses bancarios de los préstamos), que representan un 9,8% de los ingresos corrientes del presupuesto municipal, es decir, tres puntos menos que en el ejercicio anterior, que ascendieron al 12,9%. El proyecto de presupuesto prevé que la deuda neta del ayuntamiento se reduzca el año próximo en 47 millones de euros, pasando de los 829 millones de este año a 782 millones en el 2015, tal como se recoge en el Plan de Reducción de la Deuda Municipal. A juicio del equipo de Gobierno municipal, haber conseguido bajar del 10% en este parámetro es un indicador de "la salud financiera de la institución, y de que ha iniciado la senda de la recuperación económica de la Hacienda municipal".

Este dato representa una disminución del 2,9% con respecto a un presupuesto muy similar como era el de este año. En este caso, era del 12,7% de los 671 millones en los que se cifraron las cuentas municipales del consistorio y continuaba la tendencia creciente de los últimos cinco años, en los que había pasado de representar el 6,5% del total, en el 2010, a casi el doble. Este es, pues, el primer año en los últimos seis en los que este porcentaje desciende, y lo hace para volver a niveles próximos al 2011. Una disminución en la que tiene un papel fundamental la refinanciación con entidades privadas que se hará de los créditos ICO.