Se levantó el telón de las elecciones europeas en medio del desinterés y la apatía de la ciudadanía. Con más oferta política que nunca, quedan por delante 15 días de campaña en la que el principal reto será explicar la importancia de las instituciones europeas.
Mientras PP y PSOE mantienen su preponderancia en los sondeos, han surgido en el panorama infinidad de coaliciones y partidos que desde la calle y con el respaldo de los ciudadanos buscan captar a los descontentos con el sistema bipartidista, pero también a los que esperan algo más de la vida público: a políticos comprometidos, que estén con la gente y que no solo den señales de vida cuando llegan las elecciones.
El PP, que sigue conservando en los sondeos una ligera ventaja con los partidos de la izquierda, aspira a seguir gobernando en Europa. En Aragón, los conservadores saben que los comicios son un termómetro para conocer su situación. Ayer por la noche, en el acto de apertura de la campaña la candidata popular, Verónica Lope, insistió en la relevancia de la UE y recordó a los ciudadanos que es el momento de la "participación". Habló entre los gritos de algunos espontáneos que intentaron amargar el inicio de campaña a los conservadores. Se oyeron insultos como "fascistas" o "mentirosos". Defendió las reformas que su partido está impulsado tanto en España. En su opinión, los esfuerzos de los ciudadanos en los últimos años han valido la pena porque se ha logrado remontar la crisis económica.
También intervino la presidenta del Gobierno, Luisa Fernanda Rudi, que ejerció de líder y reclamó "respeto". Calló los gritos que sonaban en pleno barrio de la Magdalena y que habían obligado a Lope a acortar su discurso. Aprovechó para atacar a los socialistas, como causantes de todos los males y por lo tanto, incapacitados para volver al Gobierno sea cual sea el ámbito. "El mayor derecho es votar y debatir con los que piensa distinto a nosotros", dijo. Reconoció que los últimos años han sido complicados, pero confió en que se volverá a recuperar el ritmo. "Debemos explicar lo importante que es este momento. Pero estamos ya atravesando la tormenta", aseguró. En la plaza San Agustín se reunió más de un centenar de personas.
Por parte del PSOE, celebró un acto en la carpa de la Estación del norte ante dos centenares de personas, entre ellos el alcalde de Zaragoza y con una tímida fiesta amenizada por una orquesta pixie y con una protesta de Parques y Jardines que acabó sin incidentes (a pesar de que el Cuerpo Nacional de Policía llegó a pedir la identificación incluso al concejal Roberto Fernández) al conseguir una entrevista hoy con las autoridades municipales que asistían al acto.
La candidata socialista Inés Ayala animó a votar ante dos modelos de Europa. El de los socialdemócratas que "protege, cohesiona, genera empleo y es garantía para los jóvenes" y el que, dijo, "sufrimos". El del PP, "el de los paraísos fiscales, el de las desigualdades y el de los recortes". En la misma línea se expresó el secretario general de los socialistas, Javier Lambán, quien animó a la militancia a tener "estrés democrático" y a mostrar "su indignación en apoyo a la única candidatura que puede cambiar las políticas en Europa" ya que es allí desde donde se puede acabar con la política de los ajustes y recuperar políticas de creación de empleo y recuperación.
"Si queremos que Aragón y España cambien primero hay que propiciar los cambios en Europa con las elecciones del 25 de mayo", dijo.
