Según fuentes de la compañía citadas en el informe, el perfil más característico del cliente que visita las tiendas Ikea tiene una edad media de 36,5 años (en general personas entre los 25 y 45 años), con un alto nivel educativo y mayoritariamente mujeres trabajadoras. Viven en pisos que no superan los 81 metros cuadros de media, con lo que el almacenaje en terrazas, pasillos y galerías se convierte en una cuestión de orden que favorece su acceso a las ofertas de Ikea, muy estudiadas para este tipo de vivienda y a precios asequibles y con la filosofía de que "las soluciones ya no son para siempre". Los inconvenientes, no obstante, del montaje propio espantan a los mayores como clientes potenciales.