El exprimer ministro luxemburgués y aspirante conservador a liderar la Comisión Europea, de 59 años, es el candidato de la ortodoxia financiera y de la todopoderosa cancillera alemana, Angela Merkel, por mucho que como presidente del Eurogrupo (2005-2012) y piloto de la respuesta europea a la crisis de la deuda se saliera del guion al proponer sin éxito la emisión de eurobonos.