El tono empleado en el pleno del pasado jueves hacía intuir que Podemos y PSOE acercarían posturas y, dos meses después de desencuentros, accederían a negociar los presupuestos de este año. Finalmente, la portavoz de Podemos, Maru Díaz, y su secretario general, Pablo Echenique, confirmaron durante la mañana de ayer que habían percibido un cambio de voluntad en el PSOE que permite abordar una negociación entre ambas fuerzas a partir de la próxima semana.

Como había anunciado el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, el BOA publicó ayer la orden que modificaba las condiciones de la prórroga presupuestaria. Esa orden, formulada por el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, contempla la agilización de todos los trámites para la construcción de diversos centros educativos y hospitalarios, de tal modo que puedan ejecutarse las obras en el menor tiempo posible una vez se hayan aprobado los presupuestos de este año.

Además de la modificación de esa prórroga, el PSOE --partido mayoritario-- accedió a la negociación estrictamente parlamentaria, sin la presencia del consejero de Hacienda, Fernando Gimeno. Esta era una de las exigencias principales de Podemos, partido que ha sido muy hostil con la figura del titular del departamento, al que han acusado reiteradamente de engañarles y de mentir a la ciudadanía.

Composición de la mesa

A mediados de la próxima semana se determinará la composición de la mesa negociadora que sentará al PSOE y a Podemos, aunque también participará el otro socio de Gobierno, CHA, y el otro partido de izquierdas que tiene representación parlamentaria, IU. De esta manera, se pretende visualizar la cohesión de la izquierda de cara a la aprobación de unos presupuestos de corte social y progresista, un empeño del Gobierno de Aragón que hasta ahora se había negado a presentar las cuentas si estas no salían adelante con el voto de los partidos de izquierdas. De hecho, el Gobierno se ha negado reiteradamente a explorar otras fórmulas para aprobarlos, especialmente con Ciudadanos y el PP.

Echenique, que en cualquier caso reiteró ayer que la confianza en el PSOE es nula y las relaciones están «rotas», indicó que tanto Podemos como los aragoneses afectados por las infraestructuras pendientes habían «ganado un pulso a Gimerno». El secretario general de Podemos insistió en que su formación necesita todavía «garantías» ante la desconfianza con la que se sientan a negociar. Y esas garantías, ha agregado Echenique, tendrán que ser parte de la conversación ante la «fuerte pérdida de confianza» de Podemos en Gimeno tras constatar los últimos días que «no estaba diciendo la verdad» a los aragoneses al redactar una orden de prórroga presupuestaria «sorprendentemente más restrictiva» que la del año anterior, tomando de «rehenes» a la ciudadanía por intereses de partido.

No obstante, Podemos se abre ahora a dar su voto afirmativo a la tramitación de los presupuestos. Hasta ahora había puesto diversas condiciones para que se incluyeran en el proyecto de ley pero eso solo garantizaba su abstención en la admisión a trámite de la ley. Finalmente, esta abstención se ha tornado en un voto afirmativo si las negociaciones que emprenderán a partir de la semana próxima llevan a buen puerto.

Aunque no está establecida la metodología que seguirán, se analizará capítulo por capítulo y Podemos comprobará si sus condiciones están incluidas en los múltiples apartados que contiene la ley.