El Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) aprovechó su reunión de ayer, la primera tras la avería que ha dejado ocho días sin agua a más de 4.000 vecinos de Movera y Pastriz y a casi 400 empresas en el polígono de Malpica, para responder con el anuncio de una inversión de «unos seis millones de euros» en la red de abastecimiento de la zona donde se ha producido esta grave incidencia. Un proyecto que este año solo puede redactar y que plantea, no la reparación de la tubería dañada (ya está arreglada), sino la construcción de una nueva en paralelo y que discurriría al otro lado del eje de la carretera N-II. Serían «más de siete kilómetros de longitud», 3,5 hasta Malpica y otros tantos hasta los municipios, que permitirán, «a finales del 2021» disponer de una infraestructura alternativa en casos como el actual de corte del suministro de agua potable.

Así lo anunció el responsable de Urbanismo del ayuntamiento, Pablo Muñoz, quien admitió que sin presupuesto aprobado para el 2019 en el consistorio solo dispone de mil euros pero, aun así, se puede trabajar en lo que ahora puede impulsar, que es la redacción del proyecto constructivo, la elaboración de los pliegos y la licitación de las obras para poder adjudicar su ejecución «a finales de este año» y comenzar los trabajos. Así, se podrían ejecutar «entre el 2020 y el 2021» en dos fases distintas, hasta el polígono de Malpica primero y hasta los núcleos de población después, y dentro de dos años tener una «solución de verdad» al problema de este tramo, que no es otro que ser una de las pocas zonas de Zaragoza que no dispone de una red mallada alrededor que permita abastecer agua por tuberías alternativas en caso de avería.

El borrador de presupuesto del 2019 que ZeC presentó el pasado 3 de diciembre incluía una partida genérica de renovación de redes que cuenta con mil euros para este año pero con un plurianual de «4 millones para el 2020 y 3,5 para el 2021». «Sin presupuesto no hay vida», lamentó el edil, que ha echado mano de esta partida para «una circunstancia que no estaba prevista en la prórroga presupuestaria pero sí en el borrador del Gobierno». Eso sí, es imposible prever este gasto en diciembre cuando no se había producido esta grave incidencia.

Puede ser una respuesta rápida al serio problema que se le ha generado a los miles de afectados o simplemente una patada hacia adelante ante las críticas que esta avería les puede provocar, pero al menos la voluntad política es la de poner a trabajar a los técnicos en redactar un proyecto que duplique la tubería y evite afecciones como la que ZeC está teniendo que capear. Y que es, dijo, una cuestión de «mala suerte», porque se han concatenado el imprevisto de una rotura como la que se produce en cualquier reventón con las malas condiciones meteorológicas y en una zona que «justo en esa parte» no permite un abastecimiento alternativo. Es una de las pocas zonas en las que esto sucede. Así que la inversión anunciada era su respuesta a la «palabrería», afirmó, de quienes quieran usar este incidente para criticar al consistorio.

Según Muñoz, el objetivo es que la nueva tubería, de fundición dúctil y ubicada al otro lado de la N-II, se convierta en el 2021 en la arteria principal del abastecimiento de agua en la zona, dejando la que se ha estropeado esta semana como la red «secundaria», alternativa y solo para casos de avería con cortes en el suministro.