Con una abstención récord de al menos el 57%, el Partido Socialista francés (PS) ha ganado en Francia al conseguir entre el 29,2% y el 30,1% de los votos, superando ampliamente al partido de Gobierno, la Unión para una Mayoría Popular (UMP), al que las encuestas a pie de urna atribuían el 17%. El ultraderechista Frente Nacional de Jean-Marie Le Pen pasó del 5,7% en 1999 a tener entre el 9,5% y el 11% de los votos.

En total, la izquierda (PS, Verdes, PCF y PRG) recogió entre el 42,6 y el 42,9% de los votos emitidos y revalidó así su victoria en las elecciones regionales.

El conjunto de la derecha, con casi el 38%, ha resistido mejor de lo previsto, lo que ha permitido al presidente de la UMP, Alain Juppé, negar que "se haya repetido el voto de castigo" de las regionales. Lo cierto es que el partido de Chirac ha registrado el peor resultado desde su creación en el 2002, con el 17% de los votos.