Los zaragozanos pagarán el próximo año un 23,75% más por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y un 42,5% y un 18% más por los recibos de la basura y del agua, respectivamente. Así lo pactó ayer a la hora del almuerzo el equipo de Gobierno municipal del PSOE-CHA, que cerró justo antes de irse de vacaciones una subida espectacular de impuestos que se completa con la venta masiva de suelo público. La presión fiscal se mantendrá en el 2006 con nuevos incrementos del 12% y del 7% en las tasas de la basura y del agua, que se igualarán así al coste del servicio.
Tras dos semanas de negociaciones, los nacionalistas han cedido a las pretensiones socialistas, que han logrado imponer todas las recomendaciones del plan económico-financiero elaborado por Price Waterhouse Coopers, salvo en el IBI. El delegado de Economía y Hacienda, Alberto Lafuente, sólo aceptaba reducir la subida de la consultora del 43% al 30%, aunque finalmente será del 23,75%. A cambio, Chunta ha logrado recortar el gasto corriente en un 1,5%, lo que supondrá un ahorro de 6 millones de euros en el 2005.
El principio de acuerdo se deberá desarrollar técnicamente en septiembre para poder llevar así el pleno económico-financiero a aprobación del pleno. El retraso de medio año que acumula el proceso obligará retrasar el pago de facturas.
UN FOLIO COMO EXPLICACION Los socios del equipo de Gobierno hicieron público su "principio de acuerdo" en un escueto comunicado de un folio hecho público poco antes de las cuatro de la tarde. En 17 líneas, PSOE y CHA dan tan sólo tres cifras: la subida del 23,75% del IBI y el recorte del 1,5% del gasto corriente, lo que les pemite anunciar las posibilidades de invertir 60 millones de euros.
Lo que no tiene cabida en los cinco folios del comunicado municipal es la venta masiva de patrimonio público, también pactada entre los socios en los poco más de 60 minutos que hicieron falta ayer para terminar la negociación. Al igual que con los impuestos, las previsiones del informe económico-financiero de Price Waterhouse se han cumplido pese a que el alcalde, Juan Alberto Belloch, negara categóricamente que fuera la base de negociación del PSOE: el consistorio enajenerá en tres años terrenos por valor de 125 millones de euros, casi 21.000 millones de pesetas.
TODO TIPO DE SUELOS Las parcelas que se prevén poner a la venta serán urbanizables --para pisos sociales-- y con usos terciarios --oficinas, hoteles y comercio-- e industriales. A estos ingresos de 125 millones de euros se unirán otros nueve millones anuales en concepto de aprovechamientos urbanísiticos que le corresponde al ayuntamiento.
Fuentes municipales explicaron que en este importante paquete de enajenación de suelo no se incluye la operación Romareda, tanto en lo que se refiere a la autofinanciación del estadio con la construcción de dos torres de oficinas y comercio como a la permuta de miles de pisos sociales de Arcosur para financiar los 70 millones para la adquisición del meandro de Ranillas.
El alcalde se sumó ayer a la comisión negociadora, compuesta por su delegado de Hacienda y su primer teniente de la alcalde, Carlos Pérez Anadón, y dos tenientes de alcalde nacionalistas, Antonio Gaspar y Mar Herrero. Fuentes municipales de CHA asumieron la cesión en sus postulados, que les llevó a tirar a la basura su plan económico financiero. Sólo lograron recortar el gasto corriente, que del 1% que proponían pasará a convertirse en un 1,5%.
LA SUBIDA MODERADA DE BELLOCH Los términos del acuerdo contradicen al propio Belloch, que a principios de julio descartó públicamente la subida espectacular del IBI apuntada en el informe de Price Waterhouse. Entonces, prefirió hablar de una subida "moderada" sugiriendo la de este año, del 12%. Esta misma semana reiteró que el incremento de impuestos sería moderado, sin aclarar ninguna cifra o porcentaje. La oposición política y social se recrudecerá ahora tras quedar demostrada en el pleno extraordinario celebrado hace una semana.
