El grupo del PP en el Ayuntamiento de Zaragoza cargó ayer contra los continuos cambios del presupuesto municipal de este año y aseguró que las facturas atrasadas que aún están pendientes de pago pertenecen ahora al mandato del Belloch, porque las del anterior Gobierno popular "ya se han pagado". El PSOE negó esta versión y aseguró que los gastos sin consignación que siguen en lista de espera forman parte de la deuda que dejaron en herencia los populares.

La comisión de Hacienda aprobó ayer la cuarta modificación de crédito en lo que va de ejercicio para aumentar, entre otras, las partidas económicas de la asistencia sanitaria a funcionarios, las subvenciones deportivas, las ayudas de urgentes necesidad y los arreglos que precisa el estadio de La Romareda. Alberto Lafuente, responsable de la economía municipal, advirtió que habrá más cambios en las cuentas porque su departamento se rastrea cada día el presupuesto, "y si encontramos un euro, lo empleamos en pagar a los proveedores".

Según explicó Lafuente, las modificaciones de crédito no serían una buena práctica si la situación de las arcas del consistorio estuviera saneada. Como no lo está, argumentó, es necesario introducir cambios para atender pagos. "Si se necesita un pleno cada día para aprobarlos, se hará", concluyó.

10 MILLONES DE EUROS Ricardo Mur, portavoz económico del PP, insistió ayer en que el Gobierno PSOE-CHA ha modificado el presupuesto en cuatro ocasiones, una por mes, desde que se aprobó el pasado febrero, por un importe total de más de 10 millones de euros. "Tantos cambios responden a una improvisación constante y demuestran que el presupuesto del 2004 está mal hecho, que es una auténtica chapuza. Van apagando fuegos sin ningún tipo de criterio".

Mur se refirió a los gastos que ha tenido que cubrir el ayuntamiento y que no figuraban o bien tenían escasos recursos en las partidas presupuestarias. Entre ellos, las citadas ayudas a clubs deportivos --1,2 millones de más--; la asistencia sanitaria de funcionarios --unos 600.000 euros más--, el pago de intereses de demora --más de 1,5 millones suplementados--; o la remodelación de La Romareda para que pueda acoger los partidos del torneo de la UEFA.

Las reformas del programa económico municipal están destinadas también a acabar con las deudas pendientes por obras o servicios realizados en años anteriores. En este sentido, Mur arremetió también contra la Lafuente y aseguró que las facturas que quedan --unos 8 millones antes de que se aprobara la modificación de ayer-- las generó el año pasado el Gobierno PSOE-CHA.

"Ha sido incapaz de de imponer la disciplina a sus tenientes de alcalde y ha permitido que haya un abultado gasto corriente al que tendrá que seguir haciendo frente con modificaciones presupuestarias", dijo Mur.

Las explicaciones del responsable municipal de Economía fueron, sin embargo, muy distintas. Lafuente precisó que con los cambios aprobados ayer en la comisión se limpia definitivamente la deuda del capítulo de inversiones --gracias a esta última modificación se pagarán 2,1 millones-- y quedará todavía pendientes 5,6 millones de euros de gasto corriente indisciplinado del año pasado. "Facturas del PSOE sin consignación no hay", afirmó.

Lafuente recordó que durante el ejercicio 2003, el nuevo equipo de Gobierno pagó 7.500 facturas atrasadas de los años 98 a 2002, por un importe de 69 millones de euros.

En cuanto al plan de recorte, que obliga a todos los departamentos a reducir un 5% su gasto corriente, se ejecuta según lo previsto. "Ya se han ahorrado 9 millones", precisó.