La despoblación y la financiación autonómica centraron ayer buena parte de la intervención de la presidenta del PSOE y cabeza de lista madrileña al Senado, Cristina Narbona, en un acto celebrado en Zaragoza que sirvió para detallar el programa electoral que definitivamente presentan los socialistas para estas elecciones generales. Entre las «pinceladas» que ofreció -son 260 páginas de medidas- destacó por llamativa la idea de aglutinar servicios en las oficinas de correos de localidades pequeñas, entre los que citó los bancarios y de dispensación de medicamentos.

La exministra de Medio Ambiente socialista garantizó ante los medios de comunicación, antes de comenzar su intervención pública en la sede zaragozana del PSOE de la calle Conde Aranda, que el modelo de financiación autonómica que pretende renovar su partido tendrá en cuenta el «coste real de los servicios», es decir, la dispersión de la población y la orografía en el caso de Aragón, una eterna reclamación de la comunidad.

A lo largo de la sesión, Narbona desgranó otras medidas contra la despoblación, fruto de las conversaciones de la alta comisionada para el reto demográfico con comunidadades autónomas y entidades. Por ejemplo la extensión de la banda ancha a todas partes -algo sobre lo que «el Gobierno de Rajoy no movió un dedo desde el 2011», afirmó-, las citadas oficilnas de correos multifunción o el incremento de servicios también en las sedes comarcales, fundamentalmente en cuanto a formación y empleo, en particular para jóvenes y mujeres.

JUSTICIA FISCAL

Narbona incidió mucho en que para poder sufragar todas las mejoras sociales que el PSOE querría acometer al frente de un futuro Gobierno, para la «justicia social», ha de haber una «justicia fiscal» que permita aumentar la recaudación tributaria sin cebarse en las clases medias. Algo que pasa por la mejora de salarios -también para poder blindar constitucionalmente el incremento de las pensiones- pero también por subir el impuesto de sociedades para grandes empresas y grandes fortunas o un refuerzo de plantillas de inspección fiscal para evitar el «gran fraude», cincluso con una ley específica.

Esto permitiría acometer, por ejemplo, el incremento de la «cartera de servicios» de la sanidad pública, como la atención bucodental o la prevención del suicidio, entre las que citó.

Asimismo elogió al Gobierno de Aragón -y felicitó expresamente al ausente Javier Lambán, de visita en Teruel- por el aumento de gasto social y por ser el espejo del Pacto por la Ciencia que el Gobierno de España quiere impulsar.

La agenda medioambiental del PSOE, siguiendo el Horizonte 2030 de la ONU, pasará también por una gobernanza del agua «adaptada al cambio climático», con cada vez más frecuentes sequías, por lo que descartó cualquier trasvase. Incluído el del Ebro, que en realidad, incidió fue anulado en su día por Europa al no concederle financiación.