José Antonio Gracia perdió a su hermano Santiago, capitán especializado en la desactivación de explosivos (Tedax) en el siniestro del Yak-42. Con el informe del Consejo de Estado en la mano, este hombre, que ejerce como delegado de la asociación de víctimas en Aragón, pidió al Gobierno de España que «Federico Trillo sea cesado en su cargo como embajador». Reconoció que esta solicitud «no va a ocurrir», si no es «por la presión del resto de partidos políticos porque hay que recordarle al PP que no gobierna en mayoría absoluta».

Gracia apuntó que «no tiene deseos de venganza», pero sí «de ver a Trillo cómo hinca la rodilla en la tierra y pide perdón». «Sé que no lo hará y que el PP dará la vuelta tal y como lo ha hecho hasta ahora con desafortunadas declaraciones de Rajoy o del vicesecretario de los populares, Pablo Casado, que llegó a confundirse hasta en los años que hace de la tragedia -dijo 20-». «Esperaba más de la gente joven del Partido Popular, pero más de lo mismo», lamentó.

Sobre el propio informe del Consejo de Estado, José Antonio Gracia quiso resaltar que «llega tarde» y «después de que las familias hayan tenido que remover todo». «El Estado ha hecho lo imposible por obstaculizar la investigación», matizó.