"La movilización de los ciudadanos aragoneses frente al trasvase ha sido clave para que Zapatero se haya comprometido a derogar esta ley tan perjudicial para el campo aragonés", indicó Rafael Escanero, presidente de Araga. "Pero una vez enterrado el trasvase del Ebro se deben agilizar las obras del Pacto del Agua, como el recrecimiento de Yesa, y embalses tan necesarios como Mularroya".