Rodrigo Rato advirtió de que una "oposición frontal" al Plan Hidrológico Nacional (PHN) supondría un "error monumental". El vicepresidente se mostró convencido de que el PHN no dará marcha atrás porque sus metas son "esenciales": llevar los excendentes de agua a los regantes del sur, suministrarla a Cataluña y solventar los "graves" problemas medioambientales del delta del Ebro. El vicepresidente primero del Gobierno tildó de "desatino" tratar de poner piedras en el camino del PHN.