El sindicato CSIF denunció ayer que el Salud está "externalizando" a la clínica Quirón de Zaragoza tratamientos radio-oncológicos procedentes de Barbastro y Alcañiz "que podrían ser asumidos, en su totalidad o en su mayor parte, por los dos aceleradores del hospital Clínico", donde, según el colectivo, "se están dejando de realizar 14 sesiones diarias en esos dos aparatos".

Además, CSIF recuerda que un tercer aparato, el acelerador lineal denominado KD2, destinado a tratamientos paliativos, "permanece cerrado" y critica que "en agosto, bajo el pretexto de poder dar vacaciones al personal del servicio de Radioterapia", se cerró esta unidad en horario de tarde. Posteriormente, el 1 de noviembre, se cerró de forma definitiva, alegando el excesivo coste de su mantenimiento.

En este aparato se realizaban una media de 14 sesiones diarias en horario de manaña y tarde. "Las estadísticas utilizadas para la justificación del cierre solo tenían en cuenta el número de pacientes pero no el de sesiones por persona y algunos de ellos podían llegar a recibir hasta 20", censura el sindicato, que muestra su "preocupación" por la "calidad de los tratamientos a derivados y por la supresión".

Así, dice que los que podrían recibir en el Clínico pueden ser sustituidos por otros de un coste mucho menor pero no garantizan la eficacia, la rentabilidad social y no solo económica, que ha demostrado la radioterapia en el enfermo paliativo oncológico".