El Grupo de Intervención de Montaña de la Guardia Civil de Boltaña y Panticosa rescató ayer el cadáver del montañero de Cercedilla (Madrid) que murió sepultado por un alud el pasado 28 de diciembre en la Brecha de Tucarroya, en el valle de Pineta. El cuerpo de Matías M.C., de 19 años, fue localizado en el interior de un ibón por especialistas de la Guardia Civil, en colaboración con dos miembros de los grupos de salvamento de la Gendarmería francesa. Las intensas precipitaciones de nieve y las fuertes ventiscas registradas días atrás dificultaron las tareas de evacuación. La lugar señalizado había sido ocultado por la nieve. Y fue necesaria la ayuda de perros y un detector de metales para desenterrar el cadáver. El cuerpo se encontraba sumergido a más de un metro de profundidad. Fuentes consultadas por la agencia Efe apuntaron la posibilidad de que el viento pudiera haber arrastrado el cuerpo del joven hacia el agua, o bien que el caudal del ibón hubiera subido.