Los expertos turcos extrajeron muestras de sangre de cada pariente de los fallecidos en el accidente del Yak-42 para cotejarlas con las que guardan de los 62 militares y de los tripulantes. Aunque la responsable de los test no quiso dar fechas sobre cuándo estarán disponibles los resultados, sí mostró su compromiso por finalizarlas "lo antes posible". Se ha barajado la posibilidad de que en diez días se acabe con los análisis.