El saldo financiero de España con la Unión Europea (UE), la diferencia entre lo que aporta y lo que recibe, llegará a un resultado positivo de 5.629,37 millones de euros (936.648 millones de pesetas) el año que viene, con un descenso del 18,46%. Esta cifra será fruto de unas aportaciones por parte española de 9.816,71 millones de euros a las arcas comunitarias, un 8,98% más que el año en curso, y unos ingresos recibidos desde Bruselas por 15.446,08 millones, un 2,93% menos, según el proyecto de presupuestos. La disminución del saldo en el que será el primer ejercicio completo tras la ampliación de la UE se explica por la mayor aportación y por la paralela disminución de los ingresos recibidos, proceso que comenzó en el 2003.